El 25 de diciembre de 2021, el revolucionario telescopio James webb fue enviado al espacio en lo que fue el proyecto más ambicioso de la Nasa desde Apollo 11.
En esta ocasión, no se trata únicamente de fotografiar y estudiar más en detalle el universo lejano, sino dar de una vez por todas con algún otro planeta que pudiera ser habitable, o por qué no, que ya se encuentre habitado por distintas formas de vida.
El arma principal del James Webb, monitoreado las 24 horas por el observatorio espacial, es el infrarrojo: un sistema que le permite captar planetas fríos dentro y fuera del sistema solar.
A la fecha, se sabe con exactitud que nuestra galaxia no es única en el universo, y que posiblemente existan millones como la nuestra.
- Alfa Centauri, el sistema estelar más cercano al sol, a solo 4,36 años luz de la tierra, es la máxima esperanza de encontrar vida extraterrestre y planetas similares a la Tierra en los próximos 30 años.
- En los últimos 3 años, el estudio de la astronomía y la física se dispararon desmedidamente entre jóvenes que ansían ser parte de los próximos descubrimientos que podrían cambiar la historia de la humanidad tal como la conocemos.
«Las posibilidades de encontrar otras Tierras son bastante buenas. Creo que el descubrimiento de vida extraterrestre según lo revelado por la espectroscopia es inminente y seguramente lo verás en tu vida. Sabemos que hay miles de millones de mundos habitables en la galaxia y vamos a comenzar a buscarlos sistemáticamente. Estamos particularmente interesados en planetas como la Tierra, por lo que diseñaremos nuestras estrategias de búsqueda para encontrar esos planetas y nos centraremos en los planetas que tienen agua líquida. Sabemos que para que la química orgánica de la vida se produzca a escala planetaria es necesario que haya un solvente, y el agua es el que nos resulta más familiar», dijo Matthew Greenhouse, para el Instituto Balseiro.
